Fundamental. Todo emprendedor debe de elaborar un plan de negocio antes de lanzar su idea de negocio. Aunque sea un plan sencillo siempre será mejor que no tener nada, y sobre todo si está escrito.
Reflejar nuestras ideas en un papel nos obliga a verbalizarlas, a la vez que podemos reflexionar sobre ellas tras leerlas un par de veces. Pero elaborar un plan de negocio no tiene que ser una tarea basada en rellenar una serie de apartados sino más bien un proceso de transformación de la idea en negocio, lo que implica algo más que llenar unas decenas de hojas. Por eso, antes incluso de ponerte a redactar el documento, te recomiendo seguir estos pasos a la hora de elaborar un plan de negocio:
- Genera ilusión entre su socios: porque si tienes una visión de futuro e intereses comunes, y además te llevas bien con tus socios, habrás evitado uno de los problemas más habituales al emprender una empresa.
- Recopila toda la información posible: para así saber cómo son tus clientes potenciales, cuáles serán los principales gastos del negocio, quién es tu competencia, qué normativa tendrá que aplicar, qué necesidades de financiación tendrás y cómo las cubrirás, etc. Cuantos más datos mejor, así evitarás suposiciones e intuiciones que luego se pueden transformar en llantos.
- Realiza un análisis DAFO: pese a ser muy sencillo pero potente, uno de los mayores errores de las empresas es no analizar las amenazas y oportunidades de su entorno para ver si cuentan con las fortalezas adecuadas.
- Fija una estrategia: porque en base a las conclusiones del análisis anterior tendrás que escoger, para elaborar un plan de negocio, aquellas estrategias que te permiten aprovechar las oportunidades del entorno, esquivando las amenazas, y apoyado en tus fortalezas internas.
- Cuantifica los recursos: porque toda estrategia supondrá incurrir en necesidades de recursos humanos, financieros, materiales o inmateriales. Y de esos recursos se derivará tu inversión inicial así como las necesidades de financiación para acometerla.
- Crea un buen equipo: que esté equilibrado, unido, comprometido e ilusionado al 100% con el plan fijado. Sin duda éste es uno de los pasos más difíciles a la hora de elaborar un plan de negocio, y el que más determinará el éxito de tu proyecto.
- Establece una forma de organización y dirección: en el que fluya la comunicación, se simplifique la burocracia, que fomente la participación, retribuya proporcionalmente a los mejores, y que permita implantar y seguir el plan establecido, ajustándolo cuando sea necesario.